Cuando el pasado 14 de marzo se declaró el estado de alarma los restaurantes bajaron sus persianas y se cerraron las fronteras para la exportación. A Jaume Farràs, ganadero, y a Josep de Ros, pastor, se les bloqueaban los dos canales de venta más importantes para su producto tan preciado, la carne de ovino. Se estima que el 70% de la producción ha dejado de comercializarse, lo que supone unas pérdidas de 160 millones de euros.

Josep de Ros, pastor.  En primer plano Juan de Ros mirando a cámara. Lleva una camiseta roja y tiene barba, bigote y el pelo corto de color negro y canas blancas. De fondo y desenfocadas parte de su rebaño de ovejas. Están en el campo con pasto verde. De fondo también se ven dos árboles desenfocados.
Josep de Ros, pastor.
Un oveja y un cordero en un establo. La oveja es negra y marrón y el cordero es blanco y marrón. La oveja está cuidando del cordero. En el suelo hay paja.
Interovic, y Amazon colaboran para ofrecer deliciosa carne de cordero a los clientes Amazon Prime de Madrid y Barcelona.

Las ovejas de la tramontana

Son las nueve de la mañana y Josep de Ros ya está preparado para salir de su masía de Garrigoles (Gerona) para pastorear a su rebaño de más de 2.000 ovejas. “Aunque sople la tramontana, nosotros salimos dos veces al día. Ahora con el calor se sale por la mañana hasta las once, y a partir de las cinco de la tarde. Mis antepasados trashumaban en el Pirineo”, explica mientras recuerda que él es la quinta generación de pastores de su familia.

“Nunca habíamos sufrido una crisis parecida en el sector del cordero. Esta carne está muy asociada a la restauración y a las barbacoas familiares y con amigos”; explica Josep.

Primer plano de Jaume Farràs. Está en el establos y detrás tiene ovejas. Ell lleva una camisa azul claro y una gafas oscuras. Tiene unos 80 años y el pelo blanco.
Jaume Farràs es miembro de Interovic, la Organización Interprofesional Agroalimentaria del Ovino y Caprino.
Jaume Farràs tiene un cebadero y un matadero en Sant Llorenç d’Hortons (Barcelona).  En la imagen un establo del cebadero con ovejas. Un trabajador del cebadero con guantes, mascarillas y gorra prepara la comida para los corderos. Hay unos diez corderos blancos comiendo y otros en el establo contiguo esperando para comer.
Jaume Farràs tiene un cebadero y un matadero en Sant Llorenç d’Hortons (Barcelona).

Temporada alta del ovino

Jaume Farràs tiene un cebadero y un matadero en Sant Llorenç d’Hortons (Barcelona). Hace unos años, junto con su hijo y su esposa encontraron en la exportación un nuevo canal de venta que revolucionó su negocio.

“Esta crisis nos ha afectado mucho a nivel internacional. Además, al llegar en primavera hay que tener en cuenta que es la temporada de mayor producción de cordero porque es cuando nacen más crías y hay abundancia de pastos”, explica Jaume.

Si bien los cebaderos son un sitio de paso, Jaume añade: “Nosotros apostamos por la calidad y esto significa garantizar siempre el mismo producto gracias a una cuidada alimentación con piensos naturales, buenos establos y un cuidado proceso de sacrificio”.

La oportunidad de las ventas online

Josep y Jaume son miembros de INTEROVIC; la Organización Interprofesional Agroalimentaria del Ovino y Caprino, que como afirma Jaume: “Es un organismo que lucha por los intereses del sector”.

"Con la crisis de la COVID-19 hemos descubierto las ventajas de la venta online y esto puede ser clave para consolidar otro canal de distribución de la carne de ovino".
Jaume Farràs, ganadero

“El acuerdo entre INTEROVIC y Amazon supone una oportunidad para impulsar la venta online, con muy escasa presencia hasta el momento, y como ventana para dar a conocer nuevos cortes”, asegura Raúl Muñiz, presidente de INTEROVIC.

“Con la crisis de la COVID-19 hemos descubierto las ventajas de la venta online y esto puede ser clave para consolidar otro canal de distribución de la carne de ovino”, afirma Jaume Farràs.

Los clientes Amazon Prime Now de Madrid y Barcelona ya pueden disfrutar de cortes tradicionales de cordero y cabrito como chuletillas, piernas, paletillas, pincho moruno, filete de pierna o churrasco.