En 1997, Amazon lanzó 1-Clic, una novedad que permitía a los clientes realizar compras en la web con solo pulsar el botón de su ratón. Se acabó el introducir la misma información una y otra vez para realizar una compra.

1-Clic fue un concepto totalmente innovador en el mundo del comercio electrónico. Antes, los clientes tenían que reintroducir una y otra vez sus datos de pago para completar una compra, incluso cuando usaban el servicio periódicamente. 1-Clic acabó con esta redundancia e hizo que el proceso de compra fuera más fácil y sin interrupciones. Se convirtió en un nuevo estándar para facilitar las compras online. Cuando los clientes realizan su primer pedido e introducen un método de pago y una dirección de envío, automáticamente se habilita este sistema.